El gobernador mendocino calculó que el porcentaje final de pérdida para el sector sería «del 30 y pico por ciento, porque con el vino a granel hay que sacar el corcho, el vidrio, la etiqueta y otros tantos». El gobernador mendocino calculó que el porcentaje final de pérdida para el sector sería «del 30 y pico por ciento, porque con el vino a granel hay que sacar el corcho, el vidrio, la etiqueta y otros tantos».