Tras la guerra, la región estaba al borde de la destrucción, por lo que era «urgente volver a garantizar la estabilidad y la fuerza interna», expresó Arayik Haratiunián antes de presentar su renuncia. Tras la guerra, la región estaba al borde de la destrucción, por lo que era «urgente volver a garantizar la estabilidad y la fuerza interna», expresó Arayik Haratiunián antes de presentar su renuncia.