La vicepresidente estadounidense advirtió que el uso de esta tecnología podría «aumentar drásticamente las amenazas a la seguridad, reducir los derechos humanos y la privacidad y socavar la confianza pública en la democracia», por eso pide regularla.La vicepresidente estadounidense advirtió que el uso de esta tecnología podría «aumentar drásticamente las amenazas a la seguridad, reducir los derechos humanos y la privacidad y socavar la confianza pública en la democracia», por eso pide regularla.